Entre los días 28 y 29 de junio, hemos recibido en nuestro monasterio una de las 27 custodias —una por cada diócesis— que peregrinan por Chile como parte de las iniciativas del Congreso Eucarístico Nacional.

Cada custodia mide 75 centímetros de alto y ha sido confeccionada en plata y lapislázuli, rica en símbolos, entre los que destacan la cruz con el Océano Pacífico, la cordillera de Los Andes, y la Vía Láctea junto a la estrella: María. Los rayos que rodean el sol -Jesús Sacramentado- son las 27 diócesis del País. La columna con el mapa de Chile, se apoya sobre una base con el lema del Congreso “¿Qué haría Cristo en mi lugar?”

Como comunidad, hemos hecho adoración silenciosa y permanente desde su recepción hasta su entrega, poniendo junto a Jesús Eucaristía el particular tiempo que vivimos como Iglesia y la vida y vocación de nuestros pastores.

Rezamos, también, por tantos fieles que llegan hasta nuestro monasterio a confiar sus intenciones y las de sus seres queridos.

Humildemente, agregamos nuestros propios ruegos y acciones de gracias, confesando la bondad de  Dios y testimoniando su presencia permanente entre nosotros.

Ponemos en Dios nuestra esperanza e imploramos su bendición sobre tantos que se acercarán a Él, adorando a su Hijo en la Eucaristía, durante la visita de las Custodias Peregrinas a las distintas comunidades.

Que María, Estrella de la Mañana, nos señale el camino de retorno al corazón mismo de Dios.